sábado, 13 de marzo de 2010

ENSAYO Y CRITICA HISTORICA SOBRE EL URBANISMO EUROPEO EN CARACAS (1870- 1940) DEL AUTOR ARTURO ALMANDOZ


Por: Yorelis González
UPEL- Miranda/IPM "JM Siso Martínez"
INTRODUCCIÓN
A partir de la fundación de Caracas en 1567 con el nombre de Santiago de León de
Caracas esta se convirtió en una de las comunidades coloniales españolas más
prósperas de Sudamérica. Nuestra ciudad capital se ha encontrado en constantes
cambios ya que ella representa para todo ciudadano venezolano la concentración de
las fuentes de progreso para el pueblo y para la nación.
Desde épocas atrás nuestra ciudad capital a significado el centro de la modernidad
y de las innovaciones en nuestro país, es por ello que es en ella donde se gestaría un proceso civilizador y modernizador que marco la vida de todo caraqueño y en causa
de todo venezolano.
En tal sentido y en análisis a este proceso evolutivo, Arturo Almandoz, urbanista
venezolano, dedica parte de sus dotes como investigador y como urbanista en
reconstruir la influencia del urbanismo europeo en caracas en 1870-1940, el cual es el título de su libro escrito en 1997, en el cual se palpa esa fascinante historia
urbanística que se encuentra inmersa en el surgir de nuestra sociedad venezolana, esa
que dio un gran cambio cultural y social a la vida del venezolano y que junto a la
tecnología logro enriquecer a nuestro país y al pueblo del mismo modo.
En consideración a lo anterior el texto de Arturo Almandoz, será analizado
minuciosamente para así ver mas allá de la historia, ver un mundo que en medio de su
desarrollo y de la búsqueda de mejoras y de comodidades, cambiaba el curso de su
cultural y de su forma de pensamiento.

ENSAYO Y CRITICA HISTÓRICA SOBRE EL URBANISMO EUROPEO EN
CARACAS (1870-1940) DEL AUTOR ARTURO ALMANDOZ
Historia de la obra
La historia se desarrolla en el periodo comprendido entre 1870 y 1940, periodo
en el cual se inicia a la presidencia en 1870 Antonio Guzmán Blanco, quien con
sus ansias de construir la ciudad donde deseaba vivir, emprende una política de
modernidad en la ciudad de caracas. A través del gobierno guzmancista se
realizaron grandiosas obras públicas, caracas sufre un cambio notable, pues su
embellecimiento transformo a la ciudad colonial: dentro de las grandes obras es
imprescindible destacar el panteón nacional, el teatro municipal, la antigua
universidad, el templo de santa teresa entre otros.
De tal modo se evidencia como desde entonces la ciudad de caracas inicia ese
proceso de trasformación que gobiernos sucesivos a este tomaran como ejemplo
pero no lo podrán igualar. Es por ello que Arraiz, Luis menciona lo siguiente:
En gran civilizador como se le domino en su época, se consideraba predestinado a conducir a Venezuela por la senda de los modelos de desarrollo europeos. Así lo civilizado debía entrar en las mentes de los habitantes al compenetrase con el nuevo paisaje. En consideración a lo anterior se evidencia la fuente y la base con que el autor inicia las escrituras de su obra donde describe el ciclo de la transferencia de las ideas y la cultura urbana, a Caracas desde la renovación del Guzmanato, pasando por los olvidados episodios de la Bella Época y los Años Locos, hasta el Plan
Monumental de 1939, diseñado bajo la guía del urbanista francés Maurice Rotival.
Es por ello que el objetivo del autor Arturo Almandoz es el estudio dedicado a la planificación de la ciudad de caracas, trasladando a los fundamentos de un movimiento arquitectónico perteneciente al territorio de la modernidad, en el ámbito venezolano, y más específicamente su etapa de gestación.
Contenido De La Obra.
La obra está dedicada como trabajo de ascenso a la categoría de Profesor
Asociado, Departamento de Planificación Urbana, Universidad Simón Bolívar
Título: Urbanismo Europeo En Caracas (1870-1940)
Autor: Arturo Almandoz
Año: 2006
Ediciones: Editorial Equinoccio, Ediciones De La Universidad Simón Bolívar,
Fundación Para La Cultura Urbana.
Dicha Obra Está Estructurada De La Siguiente Manera:
Presentación
Agradecimientos
Reconocimientos
Criterios de la segunda edición
Prologo
I INTRODUCCIÓN
Ciudades Como Las Del Viejo Mundo
La cenicienta De Suramérica
La Caracas Europea: El Problema De La Transferencia
Un discurso a cuatro voces
II EL ARTE URBANO GUZMANCISTA
La doble dependencia con respecto a Europa
Una capital con salones pero sin palacios
El ilustre proyecto
Fiesta de progreso y civilización
Obras públicas
La nueva policía urbana
Haussmann en el aire
La delpiniada urbana
III LA BELLA EPOCA Y LOS AÑOS LOCOS: HIGIENE Y PROGRESO
El furor Monroe
Ariel versus Calibán
El país de Suramérica
El drama de Alberto Soria
Vista al calvario
Entre policía urbana e higiene publica
En vísperas del urbanismo
Orden y progreso
Saneamiento y comunicación
El desaire a los años locos
María Eugenia y victoria
Tráfico, expansión urbana y vivienda
IV URBANISMO MONUMENTAL
Saludos desde Kansas
¿París o nueva york?
¿Renovación i expansión¿
El ornato con la necesidad
La misión del urbanismo francés
El plan monumental de caracas
Entre Haussmannisme ameliore y modernidad
Hacia la planificación norteamericana
V CONCLUSIONES
VI APOSTILLAS SOBRE HISTORIA CULTURAL URBANA
VII BIBLIOGRAFIA
Obras de referencial
Fuentes primarias
Bibliografía secundaria
Índice onomástico
Índice de lugares
8
Ideas Principales
Como se ha evidenciado anteriormente la obra está estructurada en cuatro capítulos principales de los cuales se extrajo cada una de los aspectos mas resaltantes las ideas principales en las cuales se maneja la obra.
I. INTRODUCCIÓN
Ciudades como las del Viejo Mundo:
Primeramente, la expansión urbana de las ciudades latinoamericanas había tenido
lugar según la vieja tradición del urbanismo de “grandes maneras”. Por otra
parte, desde los comienzos de las guerras independentistas, el imperio británico
asumió la predominancia económica en la región, a través de la explotación de
aquellos recursos naturales necesarios para su capitalismo. Mientras, gran Bretaña
paso a ser el paradigma económico de progreso e industrialización, Francia pudo
consolidar el prestigio cultural que ya había ganado desde el Enciclopedismo.
Francia fue consagrada como la civilizada madrina de América Latina, así mismo,
con la connivencia de las elites locales, las antiguas colonias pudieron así entrar en una era “neocolonial”, que ha sido aproximada desde diversas perspectivas.
La cenicienta de Suramérica:
En primer lugar, muchos historiadores urbanos latinoamericanos no han
considerado a Caracas ejemplo de la europeización de entre siglos, después de ser una
capital de segunda dentro del imperio español, Caracas permaneció como la
cenicienta de Suramérica hasta las primeras décadas del siglo XX, cuando la bonanza
petrolera catalizó un explosivo crecimiento que la transformó en una capital
novedosa, con una modernidad comparable a la de Brasilia, atravesada por autopistas
que compiten con las de Los Ángeles. Así mismo, las eras en la dominación política
del país por el guzmanato, determinaron un nuevo periodo en la evolución de la
capital, rompiendo la inercia poscolonial de dependencia cultural con respecto a
España.
La Caracas europea: el problema de la transferencia:
En primer lugar, Caracas fue receptora de una transferencia urbana proveniente de
Europa, además, tomo forma durante el periodo europeizado, a pesar de la
americanización que imperaría en la era metropolitana. Por otra parte, el urbanismo
técnico surgió con las importaciones, las modas femeninas y las mitologías
carnavalescas las cuales fueron tan reveladoras como los edificios monumentales.
Hace falta una revisión sociológica, para así recobrar los imaginarios cambios y
conflictos urbanos que forjaron la nueva modernidad secular de la cultura capitalina.
El PMC podría ser interpretado como crepuscular pero ambiciosa culminación de
toda una época de aspiraciones afrancesadas, y no solo como el tímido inicio de una
era de modernidad arquitectónica y urbanística.
Un discurso a cuatro voces:
Primeramente, cuatro grandes grupos parecen ser dignos de exploración: los textos
legales, políticos y administrativos; la crónica y la novelística caraqueñas; las
descripciones de viajeros y la literatura técnica sobre la problemática urbana. Dentro
del grupo legal: los decretos presidenciales y las ordenanzas municipales,
instrumentos de regulación de la agenda urbana de Caracas, documentos
administrativos las Memorias anuales del Ministerio de Obras publicas, explican las
innovaciones y justifican la cambiante racionalidad del gasto publico en la ciudad.
Por otra parte, las crónicas costumbristas presentadas en cuadros de la vida
caraqueña, las novelas ambientadas en la capital reflejaron el polémico y vigoroso
debate de los caraqueños sobre su ciudad.
Finalmente, los cronistas de la Caracas de techos rojos no han explorado las bases
de la historia cultural de la Bella Época o los Años Locos, una contribución de esta
investigación puede llegar a ser el entrelazamiento de un único discurso histórico y
epistemológico a cuatro voces sobre la Caracas europea, en el que las visiones de los
visitantes fugaces puedan ser contrastadas con los resentimientos y frustraciones de
los personajes de las novelas urbanas.
II. EL ARTE URBANO GUZMANCISTA
La doble dependencia con respecto a Europa:
En primer término, la relación económica y cultural de América Latina con
Europa durante el siglo XIX puede ser vista como una doble dependencia que dio
origen a una era de “neocolonialismo” para las jóvenes repúblicas, debido a la
debilitada posición de España y Portugal en Europa, así como la presión ejercida por
las élites criollas, ya las colonias latinoamericanas habían obtenido desde el siglo
XVIII algunas concesiones que relajaban la hegemonía metropolitana. Incluso desde
antes de la culminación de las guerras de independencias, las posesiones
latinoamericanas habían expandido sus vínculos comerciales y culturales con los
países europeos, con el imperio británico y Francia.
Una capital con salones pero sin palacios:
Para comenzar, en relación con la arquitectura los edificios no eran muy dignos de
admirar, el Palacio de Gobierno era una buena casa pero sin ninguna pretensión
arquitectónica exterior. Por otro lado, las familias cultas de Venezuela estaban más
cerca de Europa que en cualquier otro país suramericano. Sin embargo cuando se
reunían en sus europeizados salones, los aristócratas caraqueños probablemente
anhelaban un decorado urbano digno del refinamiento con el que ya contaban sus
casonas. Finalmente, ese desfase al parecer evidenciaba el mayor drama de la
pequeña ciudad poscolonial “Caracas era una capital con salones pero sin palacios”
El ilustre proyecto:
Primeramente, el proyecto guzmancista produciría un reajuste de las prioridades y
valores del liberalismo tradicional en Venezuela: si la consolidación política de la
inestable republica había tenido una gran importancia para sus predecesores, el
caudillo miraba tal fortalecimiento como requisito para logros más positivos, tales
como el progreso y la civilización. En efecto, Guzmán decidió convertir a Venezuela
en la Francia de Sur América, tenia pensado que los principales artículos de
exportación como: el café, el cacao, el añil y el algodón, tuviesen a la Francia como
mercado central, los vinos y otros productos agrícolas franceses, disfrutarían en
Venezuela de una franquicia de derechos. También deseaba importar al país la
ciencia, literatura, las artes y la industria francesas.
Fiesta de progreso y civilización:
Durante el guzmancismo se realizo la primera Exposición Nacional de 1883,
dedicada a conmemorar el centenario del nacimiento de Bolívar coincidencia que la
historia ofrecía a Guzmán para recrear en Caracas el progresismo de una feria
industrial, donde surgió la creación del ferrocarril, donde se celebraba la Exposición
Nacional que dio paso a la electrificación de Caracas, las lámparas de querosén
fueron reemplazadas por faroles de gas desde los años 1870, así mismo, los servicios
de agua progresaron con la creación de acueductos de hierro, se importaron los waterclosets.
En resumen, la economía de la capital comenzó a florecer, la Caracas ferial pudo
disfrutar por una quincena, del frenesí industrialista de las urbes decimonónicas y
desde entonces, el Palacio de la Exposición quedo no solo como recinto testimonial
de la fiesta de progreso y civilización, sino también como epítome de que la Caracas
guzmancista no era más una capital sin palacios.
Obras públicas:
El presidente Guzmán buscaba mejorar el atractivo comercial de Caracas para el
capital internacional, así mismo, quería fortalecer la ejecución de obras públicas con la participación privada en los desarrollos gubernamentales, fue creada la Compañía de Crédito involucrando a los Boulton y otros inversionistas que patrocinaron los
edificios del Capitolio, inmigrantes europeos debían recolectar y administrar fondos
para proyectos urbanos, las obras de ornato publico eran protegidas por la policía. En 1874 se crea el Ministerio de Obras Públicas baluarte de la administración territorial.
La nueva policía urbana:
En primer término, la policía urbana controlaba el comportamiento cívico de los
caraqueños, tenían que pagar multas los borrachos y perturbadores de la tranquilidad
callejera, se cobraron licencias para la venta de alcohol. Finalmente, fue efectiva las nuevas medidas con respecto al tráfico y el transporte, la ordenanza de 1871 reguló la circulación de coches tirados a caballo, se prohibió el tránsito de recuas en las calles,y el paso de mulas por el centro de caracas, la policía urbana guzmancista elevo el nivel del urbanismo venezolano, de los códigos españoles de la era poscolonial a los estándares europeos de la era industrial.
Haussmann en el aire:
La presencia ideológica de Haussmann en Latinoamérica decimonónica apareció
un poco tarde, como ejemplo del centralismo y poderío requeridos para la
transformación de las grandes capitales. Desde las líneas barrocas de las nuevas
avenidas y los parques hasta el estilo francés de la arquitectura, las asociaciones se han establecido en cuanto al aparato estilístico y simbólico de la haussmannización,
en cuanto a Caracas se observó el eclecticismo arquitectónico y la imitación del
segundo Imperio, así como la carencia de plan y la preocupación por la limpieza de la
capital.
La delpiniada urbana:
Primeramente, la Delpiniada obra escrita en 1885 para probarles a las naciones de
Europa, donde se tiene una idea triste de la literatura venezolana, que si Francia tuvo un Víctor Hugo, Inglaterra un Byron, España un Calderón, en la joven América hay
hombres semejantes. Como reacción contra el estrecho horizonte de la literatura
guzmancista los cabecillas de la Delpiniada estaban deseosos de beber de las fuentes
germánicas y anglosajonas las cuales fueron incorporadas al panorama literario
venezolano. Finalmente, en términos de cultura urbana, el burlesco espectro de
Delpino represento el final de un ciclo de la historia caraqueña, vista como la
negación dialéctica de la europeizada cultura guzmancista.
III. LA BELLA ÉPOCA Y LOS AÑOS LOCOS: HIGIENE Y PROGRESO
El furor Monroe:
Se desempolva el mandamiento de la doctrina Monroe “América pertenece a los
americanos” por el gobierno de Cleveland tras la lucha por el terreno de Guyana, la
cual causó ruptura de relaciones diplomáticas entre Londres y Caracas desde 1887.
Así mismo, esta doctrina puede ser invocada para prevenir a una nación europea de
forzar el cumplimiento de una obligación internacional.
Ariel versus Calibán:
En 1900 apareció un manifiesto que invocaba los valores culturales de América
Latina para arrastrar el dilema materialista del nuevo siglo, por lo que llego a ser libro de cabecera de toda cabecera de toda generación, el Ariel de José Enrique Rodó
apelaba al personaje shakesperiano como alegoría de la noble espiritualidad que las
juveniles repúblicas del sur deberían oponer al Caliban utilitario que acechaba en el
norte.
Para concluir, el combate del nuevo siglo era riesgoso por la conquista moral que
había permeado en el espíritu latino, seduciéndolo con la visión de una América
deslatinizada por propia voluntad, sin la extorsión de la conquista y regenerada luego a la imagen del arquetipo del Norte.
El Paris de Suramérica:
La relativa sofisticación de la Caracas de finales del XIX se notaba que junto a la
torre de la catedral había confiterías como las que se pueden encontrar en la parte
superior de Broadway, las luces rodean todas las calles y pasan los tranvías. Además,
de ser como una Nueva York o un Londres en comparación con América Central,
Caracas era también “el Paris de Suramérica”, ya que se notaba el aire francés en la
ciudad, la influencia europea en la vida social y cultural, suficientes espectáculos,
operas, vestidos, cafés al estilo francés, entre otros.
El drama de Alberto Soria:
La adicción a Paris comenzó a ser denunciada en las obras costumbristas después
de algunos años, los jóvenes doctores venezolanos al retornar al país no soportaban el folclor de sus pueblos nativos, ni la feble modernidad de Caracas, según el pronostico del drama de Alberto Soria por la influencia de Paris en la ciudad, todo estaba bajo el cosmopolitismo. Alberto llevó el escapismo modernista a su extremo pero su drama estaba lejos de ser resuelto en la literatura venezolana, los jóvenes intelectuales que retornaban desde Europa tendrían que luchar con el provincianismo caraqueño hasta los Años Locos.
Vista desde El Calvario:
Una tarde subió Alberto Soria al paseo El Calvario, para obtener una vista
panorámica de la Caracas, lo que divisó fue la silueta resultante de la renovación
guzmancista, los avances como las tradicionales piedras que fueron reemplazadas por
superficies de concreto, se observaban los edificios otras innovaciones
arquitectónicas en la Caracas de Crespo, la arquitectura se incorpora como programa
académico desde 1895. Finalmente, Alberto notó hacia el noroeste de la ciudad una
expansión “La Pastora” que albergaría a muchas familias trabajadoras.
Entre policía urbana e higiene pública:
Las autoridades caraqueñas tomaban algunas medidas higiénicas desde finales del
siglo XIX, la limpieza pública y domestica de Caracas fue dada como responsabilidad
a la Gobernación en 1889, en éste mismo año Venezuela estuvo representada en el
Congreso Internacional de Higiene y Demografía, celebrado en Paris. Aunque
comprometida con el orden público requerido por el régimen de Gómez, la nueva
policía urbana modernizaba otros aspectos municipales, protegiendo la salubridad
pública a través de reformas establecidas.
En vísperas del urbanismo:
En comparación con la gran Bretaña el debate sanitario llego a Venezuela con
retraso, comienzan las críticas por la deplorable vida en las hacinadas viviendas de las ciudades industriales, ya para 1880 se logra atacar los problemas de higiene y
vivienda. Así mismo, la preocupación sanitaria en Latinoamérica decimonónica
resulto menos dependiente de la reforma habitacional de lo que había sido en Europa.
Por otra parte, combinando la comodidad de la urbanización con la salubridad de
la vida campestre, las ventajas de las ciudades jardín fueron contrapuestas a los
inconvenientes de las hacinadas metrópolis. Finalmente, los planes de extensión
urbana junto con la grandeza del diseño francés, proveyeron el vocabulario espacial
para la cristalización del urbanismo europeo hacia comienzos de siglo XX.
Orden y progreso:
Gómez buscaba sanar la economía venezolana de las deudas internacionales,
fortaleciéndola por el incremento de los precios de materias primas y el
descubrimiento y explotación del petróleo, se cancela la deuda externa, para los años
1920 la administración gomecista pudo ya exhibir otras credenciales que permitieron
la incorporación de Venezuela al bloque del Atlántico Norte, y su estructuración
interna como economía capitalista. Así mismo, la educación ha sido modernizada, el
proyecto de Orden y Progreso del Benemérito represento una mutación histórica del
Progreso y civilización del Ilustre Americano, acaso en la misma medida en que el
rustico hacendado encarnó la antítesis del caraqueño cosmopolita.
Saneamiento y comunicación:
Primeramente, durante el gobierno de Gómez la ley de expropiación por causa de
utilidad pública originó que las obras concernientes al saneamiento de las poblaciones o en su ensanche y reforma interior. En relación con el saneamiento, la comisión de Sanidad y régimen Hospitalario propuso un borrador de Plan de Higienización Nacional. En términos de comunicación el Congreso recomendó la adopción de unmodelo de Ordenanza de vías de comunicación y demás obras municipales. El saneamiento y al comunicación pasaron así a ser las prioridades de las obras públicas gomecistas, ayudando así a consolidar los objetivos políticos del régimen.
El desaire a los Años locos:
Se refleja la incomodidad del Benemérito Gómez al ver la influencia parisina, se
aturdía por ser un campesino simplón, nostálgico por la pérdida de la vida criolla del país, demuestra su antipatía al rechazar vivir en la Caracas, pues prefirió la quietud de Maracay. No obstante, después del desaire del Benemérito hacia las burguesías caraqueñas, éstas prosiguieron con su extravagancia durante los Años Locos, cuando el ingente ingreso petrolero alimentó un cosmopolitismo percibido por diplomáticos yvisitantes que veían los toreros residentes en la capital, las fiestas al estilo parisino entre pintorescos y exóticos, la creación del Culto de Osiris secta cómica que da el toque egipcio al exotismo caraqueño.
María Eugenia y Victoria:
Las pretensiones cosmopolitas de Caracas fueron negadas por María Eugenia
Alonso protagonista de Ifigenia (1924), ésta personificó el sacrificio de la joven
mujer cosmopolita en la Caracas gomecista. Luego de varios años de estar fuera, en
su retorno al centro de la capital no pudo percibir animación alguna del Paris de
Suramérica, por el contrario veía una ciudad chata, una Andalucía melancólica. A
diferencia de María Eugenia cuando Victoria Guanipa protagonista de la Trepadora
(1925), llegó por primera vez a Caracas, quedo fascinada con la capital petrolera,
habiendo sido criada en una hacienda del interior venezolano, obviamente carecía de
refinamiento urbano, la Caracas de Victoria miraba a Nueva Cork, por el contrario, la
de María Eugenia miraba a Paris.
Tráfico, expansión urbana y vivienda:
En primer término, como respuesta a la prioridad conferida por el gomecismo al
nuevo medio de transporta, el numero y la diversidad de vehículos a motor crecieron
en Caracas y el interior. Bajo la administración de Gómez en vista del problema del
tráfico, se crea un Reglamento de coches, automóviles, tranvías, entre otros,
expedidos por el departamento Libertador en 1913, otro reglamento estableció control
sobre la circulación de carros y minibases debido a la estrechez de las calles.
Por otra parte, después de la incorporación que Linares hiciera de los criterios
higiénicos y técnicos al análisis de la expansión urbana, la élite caraqueña migró
hacia el este, con garantía y aprobación oficial, ésta expansión fue seguida por las
actividades comerciales. Además, con el gobierno de Gómez se busco la mejora de
las viviendas de la clase trabajadora, trato de controlar las condiciones higiénicas de los alojamientos antes de ser alquilados, en 1913 se firma contrato con empresarios para construir casas económicas, un reglamento de casas de vecindad fue promulgado en 1919.
IV. URBANISMO MONUMENTAL
Saludos desde Kansas:
La satisfacción con los avances de la era posgomecista se puede ilustrar mediante
las descripciones de viajeros americanos al pujante país como la visita del senador de Kansas durante el tercer año de la administración lopecista detallado informe en “A Democracy (1940) de Henry Justin Allen”. El Senador republicano también parecía
estar satisfecho con los recientes estándares logrados por los medios de opinión
pública.
Finalmente, en Venezuela, los Rockefeller y las compañías petroleras eran los
embajadores vestidos de blanco responsables de la cruzada dirigida a eliminar la
“herencia europea” de Latinoamérica, que supuestamente la había convertido en “una
sociedad de hombres enfermos”. Así mismo, los cambios encomiados por los
visitantes norteamericanos eran apenas algunos ejemplos de la renovación social y
administrativa que estaba ocurriendo en la Venezuela lopecista, desde el nacimiento
de partidos políticos y la organización de sindicatos.
¿París o Nueva York? ¿Renovación o expansión?:
Desde La Florida hasta Chacao, se daban señales de una creciente especulación de
terrenos, urbanizados a comienzos de la era gomecista. Aunque el visitante
colombiano Luis Enrique Osorio encontraría que la expansión no era comparable
“con el impulso fabril de Chicago o Nueva York, ni con la fiebre comercial de otras
grandes urbes”. A pesar de tener veinte años de atraso con respecto a la metrópoli del norte, el distrito central de Caracas ya podía aspirar a convertirse en un pequeño WallStreet, cuyos agitados hombres de negocio no tenían tiempo que perder.
Por otra parte, El dilema metropolitano que venia de la época de Maria Eugenia y
Victoria se complejizaba con los modelos alternativos de crecimiento urbano: entre
un Paris ambiguamente asociado con la extensión de las actividades centrales y una
Nueva York que epitomaba las ventajas de la concentración.
Finalmente, aunque sin resolver los dilemas acerca de las dos metrópolis, las
propuestas, artículos e informes mencionados tuvieron el mérito de despertar los
deseos y necesidades de los caraqueños de cara a remozar su capital democrática, a la
vez que reunieron los capítulos provenientes de la agenda gomecista en una sola y
gran interrogante urbana: ¿renovación o expansión?
El ornato con la necesidad:
Primeramente, se crea el 6 de abril de 1937 por parte de Mibelli la primera
Dirección de Urbanismo (DU) de Caracas, tomando recursos técnicos y económicos
de la antigua Ingeniería Municipal, para controlar el crecimiento de la capital. Así
mismo, se dio impulso al aparato urbanístico con una nueva Comisión Técnica de
Urbanismo. Así mismo, se instaba a la reconstrucción de Caracas como una
necesidad económica, social y arquitectónica por el bien de los propietarios.
Finalmente, la concepción de Mibelli del urbanismo como equilibrio entre las
obras de ornato y las obras necesarias, a veces se calificaba a la obra de ornato como los trabajos que en realidad constituyen obras necesarias, si al momento de la
ejecución se lograba una mejor agrupación de los inmuebles y se reglamentaba las
fachadas de los mismos sobre ciertas plazas y avenidas, se uniría “el ornato con la
necesidad”. El influjo guzmancista parecía revivir una vez mas en la historia
caraqueña, en el contexto de una necesidad real de transformación urbana y de mas
recursos económicos y técnicos.
La misión del urbanismo francés:
Gaston Bardet expresaba su firme creencia de que el trabajo urbanístico era la
piedra angular de la misión real de Francia como embajadora de la civilización
occidental, no solo en sus colonias sino también en otros confines. Una de las mas
consecuentes devotas de Francia era la América Latina, donde Bardet había
escuchado el clamor por la misión francesa “en la calle en Buenos Aires como en los
salones de embajada en México, en confidencias en Santiago o en Caracas”.
Por otra parte, el líder del CIAM parecía coincidir en que la prestigiosa misión del
urbanismo francés debería prevalecer por sobre sus diferencias ideológicas con los
miembros de la EFU y los historiadores urbanos, aunque solo fuera en el caso de
América Latina.
Finalmente, la interacción de los enviados franceses con los técnicos de la DU
tiende a ser considerada como partida de nacimiento del urbanismo profesional en
Venezuela. Aunque dicho nacimiento fuera uno de los más tardíos del continente, la
paternidad del urbanismo venezolano fue así otro de los logros de la misión francesa
en América Latina.
El Plan Monumental de Caracas:
La visión colonial del mundo que portaban los enviados franceses se hizo evidente
desde la misma introducción del llamado “Plan Monumental de Caracas”, publicado
en el primer numero de la Revista Municipal del Distrito Federal en 1939, resaltando
la ubicación privilegiada de la capital venezolana.
Finalmente, el PMC le daba prioridad a la ejecución de las obras monumentales,
presididas por la construcción de la avenida Central de treinta metros de ancho,
dividida en diagonales a ambos extremos, al oeste El Calvario y al este los Caobos.
Los nuevos edificios públicos reforzarían el carácter monumental a lo largo de la
avenida.
Entre “Haussmannisme amélioré” y modernidad:
Primeramente, más allá de la renovación al estilo haussmanniano del damero
caraqueño, el equipo también incorporó algunos elementos de modernismo funcional
en el PMC, tales como la introducción del automóvil en el centro de la ciudad, la
mejora de calles para tratar de convertirlas en autopistas y la adopción de la
zonificación como instrumento. La “modernidad haussmanniana” del plan habría
combinado un tratamiento académico del casco central con un enfoque funcional para
las zonas externas de la ciudad.
Así mismo, la invocación de Haussmann en el PMC también puede explicarse
como una moderación de la modernidad de Rotival y su equipo, con lo cual se habría
buscado una fórmula cautelosa y ecléctica para la Caracas posdictatorial. De manera
que, a pesar de que Bardet creyese que para finales de los treinta, esta tendencia ya
había desaparecido del urbanismo francés, el PMC ofrecía un perseverante ejemplo
de Haussmannisme amélioré.
Sin embargo más allá de la recriminación y el autorreproche, la misión francesa
debe ser asumida como el último e inexorable capitulo urbano del predominio
cultural de París en Caracas. Continuando con el idilio comenzado por el arte urbano
guzmancista, prolongado a lo largo de la Bella Época, era comprensible que la capital
venezolana invitase a los franceses para que apadrinaran su naciente urbanismo.
Finalmente, Haussmann y Guzmán Blanco, la vieja tradición beauxartiana no
podía resultar sino en un plan que rápidamente se hizo obsoleto e inconsumable; pero
la americanizada capital acaso necesitaba de este desengaño final, suerte de canto del cisne, para así aceptar el agotamiento de su pasada veleidad francesista.
Hacia la planificación norteamericana:
En primer término, para los finales de su primer año de presidencia, Medina
Angarita debido al bombardeo a Peral Harbor hizo que proclamara ante el mundo una
alianza con el vecino del norte, pronunciamiento que incluso Gómez había evitado
durante la Primera Guerra Mundial. Así mismo, aparte de la decisión de la posición
de Venezuela en la Segunda Guerra mundial, el manifiesto de Medina confirmaba,
por el resto del siglo, la adhesión económica y técnica del país exportador de petróleo
con su principal socio y cliente.
Por otra parte, de acuerdo con su experiencia estadounidense, Rotival consideraba
que el llamado arquitecto – urbanista era un híbrido que podía ser hasta peligroso en
términos de planificación, porque el urbanista se ha preocupado hasta ahora de la
composición arquitectónica, pero de hecho ha ignorado a la planificación. Es por ello
que Rotival, el planificador, finalmente instaba a los urbanistas a que abandonaran
sus simples preocupaciones arquitecturales y asumieran el reto de la planificación
para el que estaban facultados.
Finalmente, las grandilocuentes maneras del urbanismo francés habían ya
claudicado ante los prodigios de la planificación funcional proveniente de
Norteamérica, en un proceso que se acentuaría en las décadas siguientes. El dilema
que habían confrontado los planificadores urbanos durante aquellas décadas había
sido “la cuestión de un enfoque conceptual sobre el cual basar el proceso
institucional. Un movimiento moderno de Meaux Arts inspiro el final de los 1930, y
una orientación social la mitad de los 1940, sólo para dar paso a principios de los 50 a un enfoque funcional generado de las técnicas norteamericanas”.
Fundamentación Teórica
Primeramente, hay que destacar que el autor de la obra Armando Almandoz, no es
un historiador, es un Urbanista especialista también en Arquitectura entre otras. Solo utiliza fuentes historiográficas para indagar y sustentar su trabajo doctoral y
posteriormente la obra del “urbanismo europeo de caracas” donde trata la evolución
del Urbanismo en la Caracas del ayer, el inicio de la nueva ciudad con avances en sus
ornamentos. Dicha obra se apoya en el trabajo de investigación.
El autor hace referencia de elementos y ejemplos que encuadran la obra dentro de
“La Historia Cultural Urbana”, la cual desde los finales de 1980 se ha caracterizado
por la diversidad de las fuentes y los discursos utilizados para recrear, en una
aproximación microhistorica y desde perspectivas inusitadas, manifestaciones de
actores o eventos citadinos preteridos por la historiografía tradicional, apelando a las formas de representación artística o cultural, en correspondencia a lo anterior Arturo Almandoz destaca que: “ la historia cultural tiene un dominio donde la conciencia del autor sobre las limitaciones de su relato, es una clase de reflexión sobre el estatuto del conocimiento histórico, alejado de pretensiones totalizadoras, universalistas o cientificistas.”
Idea Sobre La “Historia” Que Maneja El Autor
Como se menciono anteriormente el autor de la obra es un urbanista que se
centra principalmente en el descuido que ha habido por parte de los historiadores
en no ponerle el interés suficiente a las investigaciones del inicio y avances del
urbanismo en Caracas.
El autor maneja una historia cultural urbana, donde el urbanismo se ve como
proceso de cambio social de culturas poscoloniales que aspiraban a modernizarse. Se
maneja una historia del urbanismo, el cual es entendido según Tomas Straka como:
Esa disciplina científica creada para hacer mejor la vida citadina, la vida
ciudadana; una historia, además, del urbanismo venezolano, es
necesariamente una historia de los proyectos de sociedad y de las imágenes
de felicidad que hemos elaborado en los últimos cien, ciento cincuenta años3
De tal modo el autor señala que de los tres episodios comprendidos en el
urbanismo europeo en caracas , el guzmanato ha sido revisado como conjunto desde
la historia social y cultural apoyada en la correspondencia del Ilustre Americano con
los intelectuales de marras, o recorriendo el programa institucional y el clima cultural de la renovación musical y artística.
Sustentación documental y bibliográfica de la obra
Dentro de la obra el autor menciona destacadas fuentes, sin embargo en esta
oportunidad solo mencionaremos las siguientes:
BARROETA LARA, Julio. Los caraqueños vistos por los costumbristas del siglo
XIX (1983), Caracas: Fundarte, 1991.
BECCO, Horacio Jorge y Carlota María ESPAGNOL (ed.). La pintoresca Caracas.
Descripciones de viajeros. Caracas: fundación de Promoción Cultural de
Venezuela, 1993.
BRUNNER, Kart H. Manual de Urbanismo. Bogotá: Imprenta Municipal, 1939-1940,
2 tomos.
3 STRAKA, Tomas .Apuntes Filosóficos [documento en línea] disponible en: http://cultura urbana/ur.com.
26
CARREÑO, Manuel Antonio. Manual de urbanidad y buenas maneras (1853).
Caracas: 1857.
“El tráfico automovilístico en la ciudad de Caracas y su influencia en el futuro de la
capital”, Revista Municipal del Distrito Federal, 3, Caracas: 1940, pp.5-12.
TEJERA, Miguel. Venezuela pintoresca e ilustrada. París: Librería Española de
Denée Schmitz, 1875, 2 tomos.
VALLENILLA LANZ. Laureano, Cesarismo democrático. Estudios sobre las bases
sociológicas de la constitución efectiva de Venezuela (1919). Caracas: Tipografía
Garrido, 1961
VALLENILLA LANZ, hijo. Laureano, Allá en Caracas (1948). Caracas: Editores
Garrido, 1954.
ACOSTA SAIGNES, Miguel. “La vivienda de los pobres”, en Estudio de Caracas,
vol. 2.2, Historia, tecnología, economía y trabajo. Caracas: Universidad Central
de Venezuela (UCV), 1967.
DIAZ SANCHEZ, Ramón. Transición. Política y realidad en Venezuela. Caracas:
Editores La Torre, 1937.
ESTEVA GRILLET, Roldan. Guzmán y el arte venezolano. Caracas: Academia
Nacional de la Historia, 1986.
KING, Anthony D. Colonial Urban Development. Culture, Social Power and
Environment. Londres: Routledge & Kegan Paul, 1976.
27
CONCLUSIÓN
En base a todas la consideraciones anteriores se evidencia como La historia no
solo es escrita por historiadores de oficio, como diversos factores que se encuentran
inmersos en nuestra sociedad y en nuestro alrededor relatan una historia por si solos.
De este modo la obra anteriormente analizada refleja el surgir de la Venezuela
colonial, de los aires de modernidad y de aquel gran cambio que caracas tuvo a partir
de la presidencia de Guzmán Blanco, señalando la evolución de los ornamentos
monumentales de Caracas, el cómo fue invadida por la moda, el arte y la ideología
europea traída por el Guzmanato, perdiéndose así la cultura tradicional. Así
mismo, se puede decir que los cambios surgidos se dieron en cuanto al modernismo,
durante algunas presidencias del país, donde cada candidato le imponía su
planificación en cuanto a la urbanidad.
Caracas desde entonces se inicio en la tecnología de la modernidad lo cual trajo
grandes beneficios a la población y al avance de la nación, sin embargo, hoy día a
140 años de aquellas grandes inversiones en ornamentos monumentales, aun
podemos encontrar evidencias palpables de esta historia urbanística, aunque pese a la
poca alimentación de la cultura histórica y urbanística se han perdido valiosos
lugares.
REFERENCIA BIBLIOGRAFICAS
ALMANDOZ, Arturo. Urbanismo europeo en caracas 1870-1940. Caracas, fundación
para la cultura urbana, 2006, pp441.
ARRAIZ, Luis. Venezuela 1830 hasta nuestros días. Caracas 2007 editorial alfa pp.
410, pp 320.
STRAKA, Tomas .Apuntes Filosóficos [documento en línea] disponible en:
http://cultura urbana/ur.com

1 comentario:

Malejopnk dijo...

:O De donde sacaste toda esa información?
Alejandro